lunes, 10 de diciembre de 2012

El espectáculo de la muerte: Televisa y Jenni Rivera

Es increíble lo que puede desatar el fallecimiento de una persona, pero más allá del dolor que representa para las personas cercanas, son impresionantes los mecanismos de interés que pueden revelar.
Televisa y la muerte de la cantante Jenni Rivera es uno de los más recientes ejemplos para pensar cómo manejar la muerte de una figura pública y los intereses que se manifiestan.

Tras el anuncio de la desaparición del avión donde viajaba la cantante y 5 personas más, las televisoras, tanto Televisa como Azteca, comenzaron a manifestar muestras de información sobre el tema. Sin embargo, fue Televisa la que tuvo que salir al quite pensando en aquel dicho que reza "EL show debe continuar".

El propio manejo de la información demuestra los intereses de cada una de las televisoras y su modo de proceder ante el acontecimiento. Mientras en Azteca se presentó un tipo de enlace informativo por parte del programa ventaneando, donde se buscaba mantenerse al margen de una declaración clara sobre la muerte de la cantante. Televisa preparó dos especiales televisivos. Al ser Jenni Rivera parte del equipo de coaches del programa La voz México, Televisa tuvo que improvisar sobre su forma de accionar ante la noticia. No sólo porque la cantante fuera parte de su estructura artística, sino porque ese programa era parte de su barra estelar de programación el día del suceso, domingo 09 de Diciembre del 2012.

El primer parte informativo por parte de Televisa fue más una presentación y desfile de manifestaciones de duelo por parte de artistas (a través de sus cuentas de twiiter), que explicaciones sobre los acontecimiento.En el segundo especial, el que sustituiría al programa de entretenimiento La voz méxico, se realizó un simil dedicado a la cantante desaparecido. Confirmando la información de la muerte de Jenni Rivera, más no oficial por medio de las autoridades competentes, la televisora presentó un recuento de la vida de la cantante, su paso por el programa al que ya no podría pertenecer. De la misma forma presentando a sus artistas estelares, Paulina Rubio, Beto Cuevas y Miguel Bosé, en su faceta de amigos que pasaban por al perdida.
Sin permitirse perder a la fracción de audiencia por la que habían pagado sus anunciantes, el aparto económico de Televisa se puso a trabajar en el sustituto de su programa estelar. Mostrando su capacidad técnica y económica, se presentó un escenario "improvisado" con la fotografía de la aún desaparecida, ya dada por muerta, Jenni Rivera. Se manejó el dolor de quienes no podían procesar aún la noticia, sus compañeros de show, entrevistándolos y pidiéndoles ser parte de ese entretenimiento de luto. Miguel Bosé se reusó a hacer una aparición y solamente vía telefónica participó en la transmisión. Por su parte Paulina Rubio estuvo presente sin casi poder hablar y sólo por manifestar su lealtad a la televisora. Mientras que Beto Cuevas fue quien más estuvo presente en la transmisión.
Es evidente que Televisa tiene experiencia con el manejo de las emociones como mecanismo de captación de audiencia. Mientras horas antes el show llamado Teletón estuvo presente en sus principales canales, ahora la fortuita muerte de un artista de sus filas les permitía seguir jugando con su audiencia.
Aún este día el programa matutino de esta empresa, Hoy, realizó un programa dedicado a la cantante desaparecida.

Y es que si "El show debe continuar", Televisa no puede dejar de ganar con las transmisiones especiales que enganchan a las personas con sus contenidos.