Manipulación de fe

Se esta distribuyendo a los católicos, desde las cúpulas educadores de su iglesia, documentos para que avalen los donativos millonarios que el gobierno estatal les ha proporcionado, todo bajo el pretexto de que en las últimas semanas han sido victimas de diferentes acciones de agrupaciones que los agreden. Han que recordar que las acciones de los que estamos inconformes no están sobre la existencia de católicos o la propia construcción de sus santuarios, simplemente sobre la irresponsable actuación del gobernador al no respetar la laicidad del estado, ya que es lo que hace al proveer de recursos del erario público a la Iglesia católica.
Se anuncio ayer que 500 asociaciones civiles pueden presentar un proyecto que justifique un apoyo monetario de parte de gobierno, desde la Secretaria de Desarrollo Humano. Curiosamente el tope para cada donativo es de $ 500 mil (Público 29 Abril 2008, Sección Ciudad y Región, pág. 14), ¿qué le hace pensar al gobierno estatal que es más importante la construcción de un santuario y no la reforestación de la primavera?, o el proyecto de la educación de niños de la calle, o un sinfín que pueden ser presentados por cualquier Asociación Civil. Este apoyo anunciado para las AC lleva consigo una licitación, que representa un tiempo de análisis de cada proyecto, ya que hay que revisar y realizar todo el papeleo pertinente. ¿Por qué la AC que promueve la construcción del santuario de los mártires no actuó de igual forma ante la búsqueda de apoyo para su proyecto?, aquí se denota la irresponsabilidad del gobierno en su actuar, ya que con esto sólo manifiesta la discriminación de la que son objeto todas las organizaciones que no convergen con las ideas del mandatario estatal.
Este actuar es el que no queremos que siga vigente, y no la construcción de un templo, no las ideas católicas o a las personas que las profesan, no se debe de confundir ni manipular la información para que las personas tomen una postura ciudadana.
Aquí esta en juego la participación de los ciudadanos en referencia al actuar en común de quienes están en los cargos públicos, no la expresión personal de la fe.
No se debe de olvidar que las garantías y los derechos individuales dejan de tener vigencia y razón de ser cuando afectamos a un tercero en cuestión. Emilio González Márquez esta afectando a miles de terceros al gobernar desde su fe religiosa, pues es obvio que no sabe realizar una distinción entre el cargo público y sus convicciones de fe.

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